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El Flagelo

Saluda del Hermano Mayor

Queridos hermanos de la Agrupación del
Santísimo Cristo de la Flagelación, sea mi primer
deseo, manifestaros mi agradecimiento al invitarme,
un año más, a participar, mediante el presente salu-
da, en vuestra revista “EL FLAGELO”. Publicación
que sirve de vehículo de acercamiento a muchos
hermanos californios, procesionistas de otras Cofra-
días hermanas, y con cartageneros a cuyas manos
pudiera llegar esta revista.

Tras las elecciones a Hermano Mayor, ce-
lebradas el pasado día 16 de enero, festividad de
nuestro santo patrón San Fulgencio, conforme a las
nuevas normas estatutarias, y que han supuesto un
hecho sin precedentes en la Hermandad encarnada
al recoger la posibilidad de que todos los hermanos
cofrades, sin distinción de rango, puedan participar
en la elección de su Hermano Mayor; soy consciente
de su trascendencia y la responsabilidad que recae
sobre mí, al depositar vuestra confianza para con-
tinuar prestando servicio a nuestra Hermandad.
Ruego al Stmo. Cristo del Prendimiento y la Stma.
Virgen del Primer Dolor que me guie e ilumine para
hacer lo mejor, en bien de la Cofradía y de la Iglesia
Diocesana.

Hermanos cofrades, debemos tener muy Foto: Julian Contreras
presente que, junto al orgullo de sentirnos miem-
bros de una asociación pública de fieles, como son hermanos de la Flagelación, de “abrir el corazón
las Cofradías pasionarias y de ser parte integrante a cuantos viven en las contradictorias periferias
del acto social, cultural y religioso más importante existenciales”, debemos despertar nuestra con-
de Cartagena, como es su Semana Santa, llevamos ciencia, como nos señala el Papa, “muchas ve-
en nuestras manos un Misterio de fe, con el que ces aletargadas ante el drama de la pobreza”, de
podemos despertar en muchas de las personas que abrirnos a la esencia del Evangelio, donde para
contemplan los desfiles, sentimientos religiosos dor- Jesús los más pobres son los privilegiados de la
midos, dándoles la oportunidad de explicarles a sus misericordia de Dios.
hijos y nietos, quien es la persona con las manos ata-
das y sentenciada; quien al que están azotando con Ante la nueva etapa que comenzamos, como
burlescas miradas; quien el soldado que clava la lan- vuestro Hermano Mayor, os animo a que continuéis
za en el costado de Cristo; o quienes le descienden trabajando, con el mismo entusiasmo, ya sea en las
del madero. No nos confórmenos solamente con la diversas áreas de la Cofradía o en puestos de vuestra
estética, con abrir a otros los signos de nuestra fe, Agrupación, trabajando juntos y unidos, dando con
hagamos vida las palabras del Evangelio, digamos ello ejemplo de lo que debe ser la hermandad de la
una palabra, interesémonos por el que se queja en el que formamos parte y con la seguridad de que, con-
oficina, en el taller, en casa, regalémosle nuestra cer- tribuimos también al engrandecimiento de la Cofra-
canía, una sonrisa, la palabra amable, ayudémosle a día, haciendo creíble, como nos dice nuestro Cape-
encontrar la verdad de Cristo. llán, “el mensaje de salvación que Cristo nos da si en
verdad lo vivimos”.
En este año que el Santo Padre Francisco
lo dedica, en su Bula del Jubileo, a la Misericor- Por último, reiteraros mi agradecimiento
dia, nos recuerda que “Jesucristo es el rostro de por darme, una vez más, la oportunidad, de aproxi-
la misericordia del Padre… Quien lo ve a él ve al marme a vosotros a través de esta publicación.
Padre… Jesús de Nazaret con su palabra, con sus
gestos y con toda su persona revela la misericor- Juan Carlos de la Cerra Martínez
dia de Dios”. Tenemos de nuevo, una oportunidad, Hermano Mayor de la Cofradía
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