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El Flagelo


                                    ¿Quis est Homo?





                     Es para mí una gran satisfacción como pro-
             cesionista  y cartagenero  ser  Hermano  de  Honor
             de esta gran Agrupación del Santísimo Cristo de
             la Flagelación de la Cofradía Hermana y presidir
             cada Domingo de Ramos la Eucaristía de Palmas y
             Olivos que desde hace seis años se organiza en mi
             Parroquia en el   pórtico de la gran Semana cristia-
             na, así como colaborar en esta magnífica publica-
             ción anual.

                     La Semana Santa se nos presenta cada año
             cargada de belleza, cultura, tradición y por supues-
             to tiene que ser sobre todo un tiempo para vivir
             cristianamente los acontecimientos centrales de
             nuestra fe: la pasión, muerte y resurrección. Por                   Foto: Natalio Ruíz
             eso debemos cada Cuaresma y Semana Santa ha-       que pasara por nuestras calles en nuestros magní-
             cernos la pregunta: ¿Quis est hic homo? ¿Quién es   ficos  desfiles.  Cristo  saliendo  a  nuestras  calles  en
             este Hombre?, quien es para mí el Santísimo Cristo   la Semana de Pasión nos está pidiendo que recor-
             de la Flagelación.                                 demos algo tan elemental en su doctrina como es
                                                                el amor y la misericordia, la preocupación por el
                     Todas las imágenes  de nuestra incompa-    otro, cualquiera que ese otro sea, el aviso de que
             rable Semana Santa y  especialmente vosotros her-  al  fin  al  final  de  nuestros  días  se  nos  examinara
             manos de esta agrupación cuando veáis la imagen    precisamente por el lugar que ese otro ha ocupado
             Jesús  en la Unción de Betania en la luminosa tarde   en nuestras vidas. Si le hemos dado de comer o de
             del Domingo de Ramos y  la del Santísimo Cristo    beber, si le hemos escuchado, acogido, visitado o
             de la Flagelación en la magna procesión california   acompañado, si hemos sido capaces de recorrer con
             del Miércoles Santo, os tiene que llevar a la medita-  él un camino que le conduzca a recuperar su dig-
             ción sobre este singular hombre, un hombre que es   nidad de hombre, si es así habremos vivido la Se-
             aclamado por la multitud,  amando y perdonando     mana Santa en nuestra vida diaria. Si no lo hemos
             en la  mesa de los amigos de Betania y que más tar-  hecho, aun cuando hayamos recibido numerosos
             de será perseguido, prendido, abandonado e insul-  aplausos y reconocimientos por nuestros desfiles,
             tado, flagelado y más tarde ajusticiado y, por fin,   nos habremos quedado a medio camino, no hemos
             exultante de gloria.                               entendido a Cristo y nos hemos perdido, lastima,
                                                                lo mejor de su doctrina: el Amor y la Misericordia.
                     Aquellos judíos que habían acudido a Je-
             rusalén  para  celebrar  la Pascua  formularon,  sin      Por eso, os invito a meditar la pregunta
             saberlo, una pregunta que repetirán a través de    ¿Quién es este Hombre?, os invito a mirar, a con-
             la historia, miles de hombres de todas las épocas   templar, a poner la mirada una y otra vez a esa pre-
             y latitudes: ¿Quién es este Hombre? Y desde esa    ciosa imagen; todo el que dude: que mire al Santí-
             pregunta: ¿Porque soy cristiano? ¿Cómo vivo mi     simo Cristo de la Flagelación; todo el que sufra y
             cristianismo?                                      lo esté pasando mal: que mire al Santísimo Cristo
                                                                de la Flagelación; todo el que necesite luz y fuerzas
                     Pero si la pregunta es importante para     para seguir adelante: que mire al Santísimo Cristo
             cualquier hombre, resulta fundamental para un      de la Flagelación; te pase lo que te pase, estés atra-
             cristiano y procesionista, porque el cristianismo y   vesando una situación por difícil que sea, te ocurra
             las cofradías son, una opción por Cristo;  en la que   lo que te ocurra en la vida: mira al Santísimo Cristo
             el hombre, consciente y personalmente, ha elegido   de la Flagelación porque en El vas a encontrar el
             encontrarse con Dios con el mismo estilo con el que   Camino, la Verdad y la Vida.
             Cristo dijo que había  que encontrarse, es una for-
             ma de concebir la vida tal como la concibió Cris-         Que Él os colme de bendiciones. Afectuo-
             to, es un modo de estar en el mundo siguiendo el   samente.
             modo que fue Cristo.
                                                                                     Fernando Gutiérrez Reche
                     Hoy los procesionistas no podemos de nin-              Hermano de Honor de la Agrupación
             gún modo conformarnos con acompañar a Cristo                                     Capellán Marrajo
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