Page 15 - ElFlagelo2016
P. 15
El Flagelo
Foto: Francisco Martínez
escrito que remite a la revista con un bonito dibujo de Sobre fondo negro, color que junto al rojo
un capirote vistiendo cómo no, de rojo y negro. En los nos identifica a los hermanos de la Flagelación, otra
apartados destinados a recordar hechos pasados, des- instantánea de Julián Contreras sirve de broche a
taca este año una reseña publicada por El NOTICIE- esta nueva edición de El Flagelo; en ella el suda-
RO en marzo de 1965, en la que se hace referencia a rio avanza alzado hacia el futuro. Un futuro que
la próxima salida procesional de la agrupación de La está en manos de quienes aún no han vestido de
aparición de Jesús a Santo Tomás, agrupación herma- rojo y negro, de quienes todavía no han formado
nada con la Flagelación en febrero de 2012. parte de ese cortejo lleno de luz y color que cada
noche de Miércoles Santo discurre por las calles de
Como cronista de la Flagelación me corres- la vieja Cartagena. Un futuro que a veces se adivi-
ponde dejar constancia de lo vivido por nuestra na incierto. No obstante, quiero creer que sólo son
agrupación en 2014. Dos hechos cabría destacar. percepciones de alguien que hace ya tiempo que
Uno, la inauguración del azulejo con la imagen del fue joven. Cuando lo era, los procesionistas de en-
Santísimo Cristo de la Flagelación en la calle Real, tonces manifestaban en la prensa, con frecuencia,
un deseo de la agrupación desde hacía mucho tiem- su inquietud porque a los jóvenes no parecían inte-
po. El otro, la alegría compartida por todos los her- resarles las procesiones y sin embargo las cofradías
manos por el nombramiento de nuestra hermana pasionarias vivieron momentos de expansión unos
María Josefa García Roche, Maripe, como Nazarena años después.
Mayor de la Semana Santa de 2014. Como colabora-
dor habitual de esta publicación, en este número, en No es raro leer en los periódicos que nos
El Flagelo, 1991- 2015, describo de manera somera encontramos al final de un ciclo, de una etapa his-
como a lo largo de los años la revista ha ido evo- tórica. A ratos, yo también lo creo, especialmente
lucionando hasta llegar a su configuración actual y cuando me siento nostálgico y veo como el mundo
en otro breve artículo, El año que nació El Flagelo, que amo va adentrándose en la historia. Pero es cier-
recojo los principales acontecimientos vividos en los to que vivimos en una sociedad cada vez más lai-
ambientes cofrades de Cartagena en 1991. Un año en ca que pretende recluir la práctica de la religión al
el que, en mi modesta opinión, la cofradía california ámbito de lo privado. Algo que interfiere de lleno
cerró una larga etapa de su historia iniciada en la con el mundo de las cofradías, que tienen como fin
posguerra y se introdujo en una nueva en la que es- primordial hacer manifestación pública de fe. Es en
tamos inmersos actualmente. medio de este nuevo escenario, que se presupone
difícil, donde los cofrades tendremos que seguir tra-
Como se recoge en el editorial, también yo, bajando para que se sienta nuestra presencia, donde
desde mi doble condición de coordinador y presen- publicaciones consolidadas, como El Flagelo, pue-
tador de este número, quiero mostrar públicamente den desempeñar un papel importante. Una revista,
mi agradecimiento a todos los que han hecho posible no lo olvidemos, es ante todo un medio para difun-
El Flagelo en estos veinticinco años: los anunciantes, dir ideas, una manera de cohesionar y aglutinar a un
los fotógrafos y los articulistas, y de manera especial a grupo, otra forma de hacer agrupación y por tanto
María Victoria Botí Espinosa que fue su coordinadora de hacer cofradía.
durante muchos años. Ellos son los auténticos artífi-
ces de esta publicación que hoy llega a su vigésimo Muchas gracias.
quinta edición, haciendo historia dentro de la agru-
pación de la Flagelación y de la cofradía california. Ángel Julio Huertas Amorós
15